REPORTAJE

Malasia: Mezcla de color en Malaca

30 mayo 2020

¿Os gustan las ciudades vibrantes y coloridas? Entonces debes incluir una visita a Malaca en un viaje por Malasia. Esta ciudad es Patrimonio Cultural de la Humanidad.

Malaca es una de las ciudades más interesantes de Malasia. Un crisol de pueblos. Un universo de color situado en el Estrecho de Malaca. Y una ruta de comercio marítimo entre los océanos Índico y Pacífico, que todavía hoy se utiliza. La ciudad también se conoce como Melaka.

Vieja ciudad comercial

¿Os aburre la historia? ¡No la de Malaca! En los tiempos coloniales se asentaron aquí  los portugueses. Después los holandeses. Después los ingleses. Todos ellos han dejado testigos de su paso. Esto ha dejado en esta histórica ciudad comercial una atmósfera especial. Malaca está reconocida como Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco – y con mucha razón.

Muchos emblemas

Malaca tiene varios emblemas. Empezamos con la Porta de Santiago. Esta puerta de entrada a la ciudad la construyeron los portugueses hace más de quinientos años. Directamente detrás está la colina del castillo Saint Paul’s Hill. De camino hacia allí fijaos en los fantásticos arbustos floridos, buganvillas e hibiscos.

Arriba del todo están los restos de la iglesia Saint Paul. Un cartel dice: Esta es la iglesia católica más antigua del suroeste asiático. Un monumento nos recuerda al misionero jesuita Francisco Javier (1506-1552). De origen español.

La vista desde aquí llega hasta el mar. El aire arde a menudo en Malaca. Los asiáticos pasean con frecuencia bajo las sombrillas. El sudor es inevitable.

Restaurants
Bastantes restaurantes en Malakka ofrecen comida china e india

Montones de rincones idílicos

Al otro lado de la colina está el corazón de la ciudad. Aquí domina en rojo el Stadthuys de la época holandesa. Se contruyó en 1645 y se utilizaba como residencia para los gobernadores. Después lo utilizaron los ingleses como edificio administrativo.

En los alrededores de la plaza Dutch Square están los sitios más pintorescos: la torre del reloj, el pequeño molino de viento, la iglesia anglicana Christ Church. Delante cuelgan farolillos chinos.

Un ejemplo de tolerancia

La mezcla cultural y religiosa es normal en Malaca. La tolerancia es absoluta, es envidiable. En la misma calle, conocida como Temple Street o Harmony Street, están: la mezquita Kampung Klin, un templo hindú, un templo budista y un templo chino.

La entrada en la mezquita está permitida también para los no musulmanes, siempre que se quiten los zapatos en la puerta y vayan suficientemente cubiertos.

Resulta curioso que dentro haya una pantalla digital que muestra la fecha en rojo brillante.

El museo Baba & Nyonya Heritage Museum nos muestra como vivía aquí antaño la alta sociedad china. Aquí se mezcla la decoración de Asia y Europa. También en lo culinario la ciudad ofrece una gran variedad. La cocina india y china son una delicia.

Un comercio vibrante

No os perdáis un paseo por el Jonker Walk. Viniendo de la Dutch Square, la zona comercial empieza justo detrás del puente. Aquí, Malaca se muestra un poco más elegante y más arreglada que en otros lugares.  Hay boutiques, cafés, pubs. Entre medio se mezclan pequeños puestos de venta callejeros con helados y cacahuetes.

Emblemas sobre ruedas

Los emblemas sobre ruedas los hemos guardado para el final: Las bicicletas-taxi, (trishaws). La mayoría están decoradas con mucho ingenio y resultan bastante horteras. La decoración puede consistir en flores de plástico, peluches, figuras de Hello Kitty, bocinas, guirnaldas. Hacer un trayecto con ellos es toda una experiencia. Las conductoras y conductores ponen la música a todo volumen y aprietan el acelerador.

No es lo que más nos gusta de esta ciudad, ni exteriormente, ni acústicamente. Nadie está obligado a probarlos. No podemos negar que son parte de la imagen colorida de Malaca.

Fahrradrikschas
Decoración de las bicicletas-taxi típicas de Malakka